jueves, 3 de diciembre de 2020

Adiós Maradona

Regreso de mi retiro momentáneamente... momentáneamente
El Diego falleció. Maradona se ha marchado.

¿Y porqué nos impactó tanto la noticia? Probablemente porque Diego eramos todos los latinoamericanos que alguna vez nos divertimos con un balón de fútbol, era ése chico del barrio que todos conocemos, lo conoce el señor de la tienda, el de la carnicería, la vecina y la hija de la vecina. El mundo fue su barrio. Pero también porque su personalidad era como de fuego, era todo pasión, una fuerza de la naturaleza y eso marca a la gente. Fue todo menos irrelevante.
 
En la canción "La mano de Dios" de Rodrigo,  dicen "Talvez jugando pudiera a su familia ayudar" ¿y quién de nosotros, el populacho, no ha sentido lo que es éso? nacer y crecer en condiciones de pobreza y encontrar en el fútbol una de las pocas diversiones de la vida, luchar, pero más aún el entrañable deseo de comprarle la casita a mamá y que tus hermanos no sufran.

Si desmitificamos al personaje, encontramos las diferentes capas que conformaban al Diego. Empecemos con sus orígenes humildes en Villa Fiorito sin mucha educación académica... y como argentino vive y respira el futbol hasta lo irracional. Luego agreguemos una personalidad extrovertida, explosiva ya de grande, intenso, hombre de familia a quien además la fama le dió todo. Dicen que los escorpio son locos (Si creés en esas cosas), y al menos este lo era, y mucho. Su vida personal era un desmadre, y claro, iba por la vida sabiendo que alguien más arreglaría sus problemas por él o se los bancaría o simplemente los mandaría lejos, así, de volea.

Y NO ME SENTIRÉ MAL POR EL

Claro que me dió tristeza. Especialmente al pensar en sus hijas que perdieron a su viejo. Diego fue un ser humano, y querido por muchos. Además se fue temprano... pero, no me siento mal por él.

Estamos hablando quizás de alguien que vivió como un emperador moderno casi toda su vida (Con o sin dinero); Todo lo que su corazón deseó, lo tuvo. Vivió cosas que muchos de nosotros, mortales no viviremos nunca. Conoció a quizás todos los líderes mundiales y celebridades que quizo, presidentes y dictadores, incluyendo a un tal Gadafi con quien se fue a codear en una de sus andanzas. -Lo contó Coppola, su ex representante en una entrevista. 
Obviamente que tanta fama (más que fortuna), hace que de repente parezca que todo lo que decís está en lo correcto, vos hablás y el mundo escucha... -¿te imaginás lo que es éso? así te hacés opinólogo de temas que no conocés, y entonces te parecería también que todo lo que hacés está correcto; ¿te imaginás ir por el mundo y que nadie te contradiga? te acostumbrás a eso. 
Fue idolatrado como deidad en muchas partes del mundo, fue la reencarnación misma de Dios y particularmente en Nápoles y Argentina.
Entonces, no, no se sientan mal por él. Él vivió más vidas de las que nosotros viviremos jamás.
Todo esto moldeó también su personalidad de por sí explosiva (exacervada mucho tiempo por la cocaína). Fue pobre, fue rico, millonario, lo perdió todo, fue gordo, fue flaco y fue el barrilete cósmico.

EL FÚTBOL

"La pelota no se mancha", nos dijo. También mencionó que se presentó a partidos con tres noches de desvelo. Hizo proezas en la cancha y pienso que dió todo el fútbol que tenía para dar. Otra razón para no sentirse mal por él. Cierto, nunca sabremos lo espectacular que pudo haber sido de no ser por la droga y más aún lo que habría hecho en el fútbol mundial actual, con la disciplina, tecnología, alimentación, y los millones de hoy en día. Pero con las variables dadas, hizo todo lo que alguien como él pudo hacer. En ese sentido, no tenía ya más que pedirle o darle al fútbol.

    Ver acá los premios que recibió: https://bit.ly/39McBlM

LA LEYENDA

Como toda leyenda, Maradona tiene rasgos que rayan lo mitológico. En Cuba se quizo disfrazar, más que vestir, de Ché Guevara por un rato, fumando puros cubanos con Fidel Castro. Admiraba tanto a Fidel, que murieron en la misma fecha con 4 años de diferencia. -Y mirá que se iba apagando su vida, y a él le parecía ver a sus padres, especialmente a su madre (habían fallecido ya años antes). Los extrañaba y en sus últimas enrevistas los mencionaba. "Me parece verla (a "Doña Tota", su madre) esperandome en el tunel de la cancha", dijo; algo extraño, casi paranormal... Por si fuera poco, la iglesia Maradoniana en Argentina, la famosa mano de Dios... En fin, se paseó por el mundo cual Alejandro Magno. Y finalmente se fue, pienso yo, cuando quiso.

Se fue un grande del fútbol, se fue el 10, "El pelusa". No hay más que decir.
 
-Hasta siempre Diego.