Detener el balón con el pecho es una habilidad.
Controlarlo es un arte.
- Dos porterías.
- Driblar por 10 metros.
- Driblar a máxima velocidad hasta los 20 metros.
- Detente a diez metros de la otra portería.
- Levanta el balón y remata de volea (remate con el balón aun en el aire).
- Recupera el balón a baja velocidad y repite el ejercicio en dirección contraria.
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